Te Extraño, Me Dejaste Vacío.

No recuerdo la primera vez que te vi, no recuerdo los enojos que te hice pasar, el dolor no pasa, se siente que fue ayer cuando me abrazaste por ultima vez, siempre me deseaste lo mejor, algo hace falta muy dentro de mi y aun no se como llenarlo, tus consejos eran los adecuados cuando te pedía uno, cuando dejaste de respirar trate de ser fuerte y alentar a los que te rodeaban en ese entonces, pero me di cuenta que trataba de no aceptar la cruda verdad, siempre que hacia algo que te gustaba, me acordaba y trataba de no sentirme mal, pero era en vano por que siempre terminaba llorando dentro de mi, he perfeccionado la técnica, y puedo llorar mientras rio, pero siempre siempre siempre me duele, cada día mas y mas.

Todos mis amigos que te conocieron me envidiaron por tenerte, trataba de compartirte con ellos para que no envidiaran ya que un día me dijiste eso es pecado y no es correcto, después que te fuiste me hice oscuro, y siempre decía que quería estar contigo, no por mi voluntad, pensaba en accidentes y esas cosas para dejar de respirar. Pero claro, me enseñaste que ese otro pensamiento es imperdonable, la verdad no puedo evitar pensar.

Trato de encontrar felicidad por otros medios, algunos mas malos que otros no lo niego, hice muchas cosas para sentirme vivo y así como llegaban se iban las esperanzas.

Te extraño mucho, Abuela.